Las personas jóvenes también podrán consultar a un proveedor de planificación familiar, no solo con respecto a los métodos anticonceptivos sino también para recibir asesoramiento sobre los cambios físicos, la sexualidad, las relaciones, la familia y los problemas vinculados al crecimiento. Sus necesidades dependen de cada situación particular. Algunos jóvenes son solteros y sexualmente activos, otros no lo son, mientras que otros ya están casados. Algunos ya tienen hijos. De por sí la edad marca una gran diferencia, ya que los jóvenes maduran rápidamente durante la adolescencia. Estas diferencias hacen que sea importante conocer primero a cada usuaria o usuario, entender el motivo de su consulta, adaptar el asesoramiento y ofrecer los servicios pertinentes.