IMPORTANTE: Si la mujer solicita que le retiren el DIU, por las razones que sean, tanto médicas como personales, el proveedor no debe negarse a ello ni retrasar la extracción del DIU. Todo el personal debe comprender y aceptar que no se debe presionar o forzar a la usuaria para que siga usando el DIU.

Si la mujer encuentra que algunos efectos secundarios son difíciles de tolerar, primero hable con ella sobre los problemas que tiene (véase “Manejo de problemas”). Pregúntele si prefiere intentar controlar esos problemas o que le retiren el DIU de inmediato.

En general es sencillo extraer el DIU. Puede hacerse en cualquier momento del mes. La extracción puede ser más sencilla durante la menstruación, cuando el cuello uterino está distendido naturalmente. En casos de perforación uterina, o si la extracción no resulta sencilla (por ejemplo, cuando no se encuentran los hilos del DIU), remita a la usuaria a un médico con experiencia capaz de utilizar una técnica de extracción apropiada.

Explicación del procedimiento de extracción

Antes de retirar el DIU, explíquele a la usuaria lo que sucederá durante la extracción:

1. El proveedor introduce el espéculo para ver el cuello uterino y los hilos del DIU y limpia cuidadosamente el cuello uterino y la vagina con una solución antiséptica, como una solución yodada.

2. El proveedor le pide a la mujer que respire lenta y profundamente y que se relaje. La mujer debe decir si siente dolor durante el procedimiento.

3. Usando una pinza de Kocher recta sin dientes, el proveedor tira de los hilos del DIU lenta y suavemente hasta que el DIU sale por completo del cuello uterino.